Este 2 de octubre la Organización Mundial de la Salud conmemora el día mundial del estómago y en CeCim queremos generar conciencia de esta enfermedad que año a año causa miles de muertes en nuestro país. Para esto, entrevistamos al Dr. Erik Gómez, oncólogo y médico investigador de nuestro centro.
¿Cuál es el impacto del cáncer de estómago a nivel mundial y en nuestro país?
A nivel mundial el cáncer gástrico ocupa el quinto lugar de incidencia, con cerca de un millón de casos y con una mortalidad lamentablemente también muy alta, con alrededor de 660.000 muertes.
En Chile también existe una alta incidencia, diagnosticándose aproximadamente 5000 pacientes, ubicándolo en el cuarto lugar en incidencia y el segundo en mortalidad con casi 4000 fallecidos por esta causa, según los datos entregados por la Organización Mundial de la Salud.
¿Cuál es la mayor complejidad de esta enfermedad?
Lamentablemente, y esto no es solo para el cáncer gástrico, su sintomatología es inespecífica, pudiendo solaparse con otros cuadros como gastritis u otras cuadros digestivos. La sintomatología muchas veces se da cuando los la condición es avanzada, pudiendo presentar pérdida de peso, vómitos con sangre, dificultad para ingerir alimentos, anemias y otros síntomas, entonces. El llegar al diagnóstico en etapas avanzadas limita la posibilidad de ofrecer alternativas de tramamiento con intención curativa de la enfermedad.
¿Hay formas de poder prevenir el cáncer gastrointestinal?
Considerando lo complejo de diagnosticar la enfermedad, hay algunas medidas que han demostrado disminuir el riesgo de tenerla o encontrarla en fases tempranas.
Lo primero es tomar conductas frente a esta sintomatología inespecífica como las recién mencionadas. La consulta médica oportuna puede levantar la sospecha del profesional quien puede apoyar su sospecha mediante la realización de una endoscopía digestiva alta, método que mediante la observación de la lesión permite la toma de muestra de biopsia para su confirmación por anatomía patológica.
También es importante recordar que el antecedente de familiares con esta enfermedad, especialmente en menores de 50 años, también debiese alertarnos sobre el riesgo de desarrollar esta enfermedad con un componente de predisposición genéticamente cercana a un 3%.
Otra de las herramientas para la prevención del cáncer consiste en la erradicación de una bacteria llamada Helicobacter Pylori, la que se ha llegado a relacionar hasta en el 80 % de estos tumores.
La obesidad, la dieta alta en sal, consumo de alcohol, el tabaquismo y la baja ingesta de frutas y verduras también ha mostrado aumentar el riesgo, por lo que sugiere mejorar nuestro hábitos alimenticios, sugiriendo una dieta mediterránea.
¿Cuál es la importancia de realizar investigación en cáncer gástrico?
La investigación en cáncer gástrico tiene distintas aristas que se encuentra en desarrollo. Desde el punto de vista diagnóstico, además de la descripción del tejido según sus características histológicas, en los últimos años se han descubierto algunos mecanismos celulares que promueven el desarrollo tumoral o que le permiten a los tumores evadir la acción de defensa del sistema inmune. Es en estos mecanismos donde se ha enfocado el desarrollo de moléculas que permiten bloquearlos y de esta manera mejorar el pronóstico, calidad de vida y ser un complemento a las terapias clásicas del cáncer, como la cirugía, radioterapia y la quimioterapia.
Las principales sociedades oncológicas en sus guías consideran la posibilidad de recibir la terapias en investigación en distintos cánceres, siendo el gástrico uno de ellos. Nuestro país no es ajeno a la investigación y desarrollo de las nuevas moléculas para el tratamiento de cáncer, existiendo distintos centros donde se desarrollan los denominados estudios clínico, los cuales deben pasar distintas instancias reguladas por el Instituto de Salud Pública, que garantizan la seguridad de los pacientes que deciden tratarse por este mecanismo.
En síntesis el manejo del cáncer gástrico ha evolucionado hacia mecanismos multidisciplinario y personalizado, es decir, en determinar que un cáncer gástrico tiene ciertas particularidades que permiten ofrecer un tratamiento con mejor rendimiento que a otro tipo de cáncer gástrico y esto es gracias al desarrollo del diagnóstico de esas particularidades y el desarrollo de terapias dirigidas a éstas, lo que nos ha mostrado avances en mejorar el pronóstico de nuestros pacientes.
